Seguramente ya te habrás dado cuenta, ¡pero los niños siempre buscan la autonomía! Quieren hacer cosas por sí mismos... incluso cuando son muy pequeños. De eso se dio cuenta Maria Montessori.

Una de sus frases más conocidas es "ayúdame a hacerlo solo". Había observado que los niños buscan constantemente la manera de hacer las cosas por sí mismos, y desarrolló toda una pedagogía que les permite hacerlo a diario.

De hecho, recomendaba darles independencia en todas sus acciones y en todas las estancias de la casa. Hoy te invitamos a descubrir 9 consejos que puedes aplicar fácilmente en casa para ayudar a tu hijo a ser más independiente en la cocina. 
 

1 Autonomía desde una edad temprana.

Cuando uno se toma el tiempo de observar a los niños, se da cuenta de que intentan constantemente hacer cosas por sí mismos. Quieren prescindir de la ayuda de los adultos. Al tener éxito por sí mismos, ¡crecen!

Por eso les encanta participar en la vida cotidiana y en las tareas domésticas. María Montessori explicó que los niños disfrutan con lo que los adultos llamamos "tareas". Estas pequeñas tareas cotidianas les permiten desarrollar sus habilidades. Ella llamaba a estas actividades cotidianas "vida práctica". 

Tu papel como padre es organizar tu casa y el entorno general en el que vive tu hijo para que pueda experimentar. Participando en todas estas pequeñas tareas cotidianas, tu hijo se sentirá reconocido como un miembro importante de la familia, pero también como un individuo por derecho propio.

Así aumentará su autoestima y su sentido del logro.
Se puede hacer en cualquier habitación de la casa... Especialmente en la cocina, ¡que es una fuente casi inagotable de experimentación para niños de todas las edades!

2. Acondicionar la cocina para facilitar la vida independiente.

Consejo nº 1: Dé a su hijo libre acceso a los productos que utiliza solo. 

¿Qué mejor manera de empezar que dejar que tu hijo coja por sí mismo todos los utensilios y herramientas que sabe utilizar? Así, no tendrán que pedirte que los utilices.

En particular, puedes dejar a su disposición sus platos, cubiertos, vasos, mantel individual, etc. Así podrán poner la mesa cuando llegue la hora de comer. Pueden hacer todo esto ellos mismos. La idea es permitirle asumir esta responsabilidad de la A a la Z sin que necesite tu ayuda ni una sola vez. 

Consejo n.º 2: Haz que tu encimera sea accesible.

Tómate un momento para ponerte en el lugar de tu hijo. Estás en la cocina, cortando los tomates para la ensalada. Los lavas, los escurres y los cortas antes de colocarlos en el plato. ¿Qué ve tu hijo mientras haces todo esto?

Puede ver cómo agitas las manos, cómo pasa un tomate de vez en cuando... Pero no puede ver cómo realizas cada paso porque es demasiado pequeño para ver lo que hay en la superficie de trabajo... Y, por lo tanto, es aún menos capaz de participar y aprender a hacerlo él mismo. Así que tiene menos posibilidades de participar y aprender a hacerlo por sí mismo. ¡Qué frustrante puede ser para él!

Si les permite ver la superficie de trabajo y sus actividades, les ayudará a aprender de sus acciones. Los niños son mucho más sensibles a las instrucciones visuales que a las verbales.

Así que es mucho más fácil que un niño entienda lo que significa lavar tomates si te ve hacerlo, pasándolos bajo el agua, frotando su piel... en lugar de que tú le digas cómo hacerlo.

Si está a la misma altura que tu encimera, podrá verte avanzar. 

Y lo que es más, pueden hacer todo esto solos, bajo su supervisión, con total autonomía.

Esto les permitirá desarrollar toda una serie de nuevas habilidades y también aumentará su autoestima. 

Por eso le recomendamos nuestra torre de observación. Permitirá a su hijo acceder a la superficie de trabajo, a su altura, ¡con total seguridad!

Es práctica y fácil de desplazar gracias a sus dos ruedas. Podrás encontrar diferentes tamaños que se adapten al tamaño de tu familia, ¡y añadir una serie de opciones para diversificar su potencial!   

Consejo n.º 3: Instala un punto de agua de fácil acceso. 

Otro consejo para fomentar la independencia de tu hijo en la cocina es facilitarle el acceso al agua. Quizá puedas ofrecerles una pequeña estación a su altura?

¿Podrías colocar sus tazas y un enfriador de agua encima?

Esto les permitirá beber en cuanto sientan la necesidad, al tiempo que desarrollan su motricidad fina (pulsar el botón de la fuente, llenar el vaso, llevárselo a la boca, etc.).

Por supuesto, es probable que se derrame agua. Así que asegúrate de proporcionar esponjas o toallas para que tu hijo pueda limpiarse solo.  

Consejo nº 4 para fomentar la independencia de tu hijo en la cocina: un puesto de "fregado" a su altura.

Una vez terminada la comida, seguro que tu hijo tiene un poco en la boca, ¿verdad?

¿Y si preparas un lugar para que se limpien solos? A menudo tendemos a hacerlo por ellos. Pero, al final, es muy posible darles la oportunidad de hacerlo ellos mismos.

Para ello, puedes habilitar un espacio en tu cocina donde preparar un espejo a la altura del niño, guantes húmedos y un pequeño cesto para la ropa sucia, por ejemplo. Así, tu hijo podrá lavarse solo, sin tu ayuda. 

 
3. Anima a tu hijo a ser independiente en la cocina a diario. 

Consejo nº 5: ¡Introduzca a su hijo en todo tipo de utensilios!

No es infrecuente, a menudo debido a nuestra propia educación, impedir que los niños utilicen determinados utensilios.

Sin embargo, en el método de enseñanza Montessori, recomendamos permitirles experimentar tan pronto como los niños sean capaces de hacerlo. Para ello, permanecemos cerca de ellos y les mostramos cómo proceder.

Por supuesto, no se trata de dar a tu hijo un cuchillo y dejar que lo pruebe por su cuenta sin más. La idea es que se familiarice poco a poco con esta herramienta. Por ejemplo, hay cuchillos de flequillo con punta redonda.

Permiten a los niños cortar con total seguridad. Estas cuchillas Montessori están diseñadas para las manos pequeñas y la motricidad fina de los niños, de modo que puedan utilizar toda su fuerza para cortar. Hay tantos experimentos posibles como utensilios.

Si tu hijo aún no tiene la motricidad suficiente para cortar por sí solo, quizá puedas sugerirle que exprima los cítricos o remueva los alimentos en un cuenco...

El objetivo de este consejo es que en cada etapa, a cada edad, puedas presentar a tu hijo nuevos utensilios y herramientas de cocina... ¡para saciar su sed de experimentación! 

Consejo nº 6: Invite a su hijo a ayudarle a preparar las comidas.

¿Preparándose para cocinar?

¿Por qué no le pide a su hijo que le ayude?

Así podrás confiarles tareas que puedan realizar por sí solos.

Así se sentirán tan útiles como cualquier otro miembro de la familia. 

Consejo nº 7: Ritualice el servicio de mesa.

He aquí otra idea práctica y fácil de poner en práctica con tu hijo... ¡aunque sea pequeño!

Recuerda que a los niños les gusta participar en las tareas cotidianas. No son "tareas" para ellos. Al contrario. Sienten que están haciendo algo importante.

Algo que sólo hacen los "grandes". Invítale a poner la mesa y a colocar los cubiertos. Luego puede llevar los platos y los cubiertos de uno en uno. Es un verdadero trabajo para él.

Además de mejorar su concentración, esto les ayudará a ganar confianza en sí mismos. Para un niño, jugar a decantar objetos y poner la mesa son dos tareas diferentes. No hay jerarquía entre estas dos actividades. 

Consejo nº 8: En la cocina, ofrezca independencia durante las comidas.

A la hora de comer, pregúntate siempre si lo que vas a hacer puede ser una ayuda útil. ¿Puede hacerlo solo? Por ejemplo, si se le cae pasta al lado del plato, ¿puede recogerla él solo?

Cuando le sirves su plato, ¿habría sido capaz de servirse él mismo el plato? Éstas son sólo algunas ideas, pero si las trabajas a diario, ¡podrás dar a tu pequeño aún más independencia en la cocina! 

Consejo nº 9: ¿Qué puede hacer después de comer?

Nuestro último consejo sobre independencia en la cocina se refiere a la sobremesa. ¿Qué puede hacer su hijo? ¿Puede recoger? ¿Tirar la comida a la basura? ¿Limpiar los platos? Averigua qué tareas puedes asignarle.

A sus ojos, es una verdadera señal de confianza. Le estás "confiando" algo importante.

Para ayudar a su hijo a ser más independiente en la cocina, le recomendamos nuestra estación de lavado, que puede utilizarse para lavarse las manos y/o los cubiertos después de comer, por ejemplo.

Esperamos que estos consejos le resulten útiles en su día a día.

Por último, lo más importante es la visión de esta autonomía que tendrá como adulto.

No siempre es fácil cuestionar lo que siempre se ha visto, oído o hecho. Pero dar un paso atrás y preguntarse: "¿Podría hacerlo solo? puede marcar la diferencia. A veces basta con una pizca de sal para ayudar a tu hijo a ser más independiente en la cocina... Y si tienes algún otro consejo, ¡no dudes en compartirlo en los comentarios!